jueves, 14 de noviembre de 2013

TANTRA: EL MASAJE DEL YONI

La realización del masaje Yoni es una experiencia tántrica incomparable. Su finalidad no es el orgasmo aunque, evidentemente, no es algo a despreciar durante el masaje. Además, si se produce durante un masaje Yoni será más completo, placentero, satisfactorio e intenso. Pero como decíamos, el objetivo es poder dar placer a tu pareja y unirte más a ella. Es "una experiencia maravillosa". Para que el masaje del Yoni sea totalmente satisfactorio es necesaira una liberación mental en la pareja total. Además, hay que tener muy presente que la persona que está dando el masaje no debe esperar nada como retribución, mas allá del placer propio de estar dándolo y el compartir el momento con la persona amada. Esta nueva perspectiva abre la mente a un nuevo tipo de sexualidad, desconocida en la mentalidad occidental. A continuación vamos a ofrecerte una guía para que puedas realizar este masaje de la mejor forma posible y, así, conseguir una satisfacción plena. Preparativos del masaje Yoni Previo al masaje debemos preparar el ambiente apropiado, el más propicio para un relax total. Para ello, elige o crea un espacio que os permita sentiros cómodos y en contacto con vosotros mismos. El masaje lleva su tiempo y éste debe ser respetado a toda costa. No podemos apurar el masaje, Tenemos que darle todo el tiempo necesario para que sus efectos sean tan poderosos cómo buscamos. Debe haber una conexión con nuestra pareja mediante el contacto físico: abrazándonos, acariciándonos… Posición y Respiración La mujer debe estar acostada, en una posición confortable, con una almohada bajo su cabeza, de forma que pueda mirar hacia la zona de sus genitales y, a la vez, a su pareja. Coloca otra almohada bajo su cintura para mayor confort. Debe situarse con las piernas abiertas y con las rodillas ligeramente dobladas. Quien vaya a realizar el masaje debe sentarse entre las piernas de su pareja de forma que pueda tener total acceso al Yoni y a las otras partes del cuerpo de su compañera. Cómo hemos dicho, la respiración es muy importante. Antes de comenzar el masaje, tenéis que respirar profundamente, una respiración relajante que os preparará para el masaje. Durante todo el masaje, debéis mantener esa respiración: profunda, lenta y estar absolutamente relajados. El masaje tántrico del Lingam Comenzaremos masajeando el abdomen, los muslos y los pechos de nuestra pareja. Aún no masajees el Yoni, esta fase servirá como introducción relajante al masaje. Tras unos instantes de masaje introductorio, es el momento de lubricar el Yoni. Para ello coloca una pequeña cantidad de aceite o lubricante en el montículo del Yoni. Éste debe derramarse sobre el labio exterior y cubra la parte externa de la vagina. Y comenzamos a masajear suavemente el montículo del Yoni y los labios externos. Con mucha suavidad, coge el labio exterior con el pulgar y el índice y recorreremos todo su largo de los dos labios, en forma ascendente y descendente. Hacemos lo mismo con los labios interiores, en la misma forma, pero aún con más suavidad ya que éstos son aún más sensibles. La chica puede masajearse a sí misma los pechos. Para aumentar las sensaciones, debéis miraros a los ojos tanto como sea posible. Tras esta fase pasaremos a masajear el clítoris. Aquí los movimientos deben ser suaves, circulares y muy precisos. Cogemos el clítoris entre nuestros dedos y lo presionamos suavemente. Mucho cuidado ahora. Con mucha suavidad, introduce el dedo medio de la MANO DERECHA dentro del Yoni. La mano derecha (no la izquierda) ya que se relaciona directamente con la polaridad en el Tantra y es de suma importancia para un óptimo resultado final. Con mucha delicadeza, masajea suavemente el interior de la vagina. Aumentaremos la velocidad pero no enloquecidamente. Debemos ir variando la fuerza, la forma, la velocidad y la presión de los movimientos que vamos realizando de una forma paulatina y dependiendo de las sensaciones que experimente la chica. Ella con sus reacciones nos irá guíando. Con una rotación de muñeca, dejaremos la palma de la mano mirando hacia arriba y moveremos nuestro dedo desde la posición extendida hacia la palma de nuestra mano, doblándolo lentamente y sin hacer excesiva fuerza. El gesto es como si estuviésemos pidiendo a alguien que se nos acerque. Notarás una zona de tejido esponjoso justo debajo del hueso pélvico y detrás del clítoris. Este es el punto sagrado tántrico (el punto G). Una vez encontrado este punto haremos movimientos circulares, de adelante hacia atrás o de un lado hacia el otro. También podemos insertar el dedo que se encuentra al lado del medio. Esto debería proporcionas más placer y excitación en la mujer. Otra posibilidad es introducir el dedo meñique en su ano, mientras seguimos con el masaje. Para ello será necesario el uso lubricantes y ser aun más delicados. Muchas mujeres mediante el masaje Yoni pueden aprender a ser multiorgasmicas. Con el dominio del masaje Yoni tu vida sexual se verá inmensamente enriquecida y aprenderás muchísimo sobre la sexualidad

lunes, 15 de julio de 2013

¿CUAL ES LA FRECUENCIA "NORMAL" DE LAS RELACIONES SEXUALES?

Frecuencia de las Relaciones Sexuales - La Ley de Fisher Uno de los temas más frecuentes en las consultas sexológicas versa en torno a la frecuencia de relaciones sexuales. Son muchas las parejas que se preguntan ¿cuánto es lo normal?, pero también son numerosas las que desean aumentar su frecuencia. Sobre este tema hay algunos comentarios pertinentes. Por un lado, mantener muchas relaciones sexuales, incluso diariamente, no representa ningún problema para la salud, ni debilita físicamente y mucho menos mentalmente. No "desgasta", por decirlo de alguna manera. Otro aspecto importante por destacar, es que la sexualidad no se comporta como las otras necesidades físicas en las que la satisfacción de la necesidad calma el deseo. Es decir, cuando tenemos hambre, ésta se nos quita comiendo, pero no funciona exactamente igual con el sexo. Fisher, prominente investigador canadiense, describe que si una persona mantiene, por ejemplo dos coitos, por semana; cuando disminuye su frecuencia a una o menos, inmediatamente siente un aumento en el deseo sexual que lo insta a la intimidad. Pero si el individuo, por diversas razones, no reasume las relaciones sexuales por un largo periodo, entonces el deseo disminuye y puede llegar hasta desaparecer. Lo contrario también es cierto. Cuando una persona tiene una frecuencia dada, tomemos el mismo ejemplo, dos relaciones por semana y por diversas circunstancias aumenta a siete por semana; inmediatamente siente una saciedad sexual. Sin embargo, si continua con esa frecuencia, el cuerpo no solo se adapta sino que hasta le pide más. Así, entre más relaciones sexuales mantenga una pareja, más relaciones sexuales le pedirá su cuerpo. Mientras menos relaciones sexuales se sucedan, el cuerpo pedirá cada vez menos, hasta el punto de llegar a abolirse el deseo sexual. Esto explica muchos fenómenos que pasan en la vida de las parejas. Muchas veces un distanciamiento emocional o físico, por ejemplo como el que condicionan algunas enfermedades o los conflictos de pareja, si además se alargan en el tiempo, pueden provocar una disminución en el deseo sexual. En esas circunstancias el cuerpo no pide, no requiere, no exige ni demanda la vida sexual. Cuando las condiciones que provocaron ese distanciamiento han sido superadas, las parejas se dan cuenta que hay gran menoscabo en su vida sexual. La sexualidad deja de figurar entre sus apetitos y muchas veces se mantiene una vida de pareja "como entre hermanos". Hay una enorme compatibilidad en el día a día, pero no hay una necesidad de acercamiento sexual. Ante estas circunstancias, en la actualidad se han diseñado una serie de programas de "sexualización", destinado a que esas parejas recuperen el deseo sexual perdido, tan importante para la salud de la pareja que incluso se podría decir, en muchos casos, que es la forma "carnal" de expresar los sentimientos que nos unen al otro individuo.

jueves, 11 de julio de 2013

EYACULACIÓN FEMENINA - ¿TODAS SABEMOS DE QUÉ SE TRATA?

Uno de los hallazgos más sorprendentes de los últimos años fue el redescubrimiento del punto G. Con el surgió un concepto aún mas revolucionario, cual es la presencia de una auténtica eyaculación femenina. Es bien sabido que la mujer produce una secreción vaginal al momento de la excitación, que tiene como objetivo lubricar las paredes vaginales para que la penetración no resulte dolorosa. Inicialmente, se creyó que el relato de muchas pacientes en el sentido de que expulsaban un líquido abundante al momento de las relaciones sexuales, hacía referencia a esa lubricación vaginal. Sin embargo, varios investigadores se dieron a la tarea de estudiar detalladamente el fenómeno y se llegó a la conclusión que en algunas mujeres, además de la lubricación vaginal, se produce la salida de un líquido a través de la uretra o caño de la orina, al momento de la relación sexual. Este líquido no es orina. Física y químicamente difiere de las características urinarias y su salida a través de la uretra descartan la posibilidad inicial de que sea simplemente lubricación vaginal. La eyaculación femenina acontece justo cuando sucede el orgasmo, sobre todo en las mujeres conocedoras de las técnicas de estimulación del punto G. Esta información es muy útil a nivel clínico, en el sentido de que algunas mujeres creen que se orinan con las relaciones sexuales y esto les provoca fuertes inhibiciones en su desempeño sexual. Por otra parte, varias pacientes han sido operadas de la vejiga, porque tanto el médico como la paciente creían que se trataba de un caso de incontinencia urinaria. Sabemos que no es una incontinencia urinaria porque se produce aun cuando la mujer ha orinado antes de la relación sexual. Además, a diferencia de la incontinencia urinaria clásica, esta salida de líquido solo se produce con el acto sexual y no con los esfuerzos físicos. A nivel vivencial, las parejas presumen que no se trata de orina, básicamente porque esta secreción no huele a orina, y aun cuando es abundante y moja las prendas de cama, no se acompaña de ese olor urinario tan "sui generis". Desde el punto de vista médico, el diagnóstico es relativamente sencillo. Se le pide a la pareja que recoja una muestra del líquido y se analiza microscópicamente para diferenciarlo de la orina. Hay que ser claros: No todas las mujeres presentan la eyaculación femenina, y en muchos casos es un problema en la retención de la orina. Lo que es cierto es que un grupo considerable de mujeres experimentan este fenómeno, que es visto por ambos miembros de la pareja como un deleite más en el mundo de los placeres del sexo.

jueves, 2 de mayo de 2013

Educación sexual en la primera infancia

1. “Lo que tengan que saber de sexo lo aprenderán solos” Uno puede pensar esto porque cree que así le ocurrió durante su infancia: que aprendió solo. Si bien mucho de lo que saben pueden haberlo asimilado de compañeros del colegio, de juegos, de primos/as, de la televisión, etc., es posible que no lleguen a captar toda la información recibida, además la misma puede no ser correcta. La información brindada desde el seno de la familia dará mayor seguridad y tranquilidad. 2. “Que se lo expliquen en el colegio” Esto suele ser un tema de discusión. La enseñanza debe estar primordialmente a cargo de los padres, pero es necesario acordar con los docentes respecto de valores y costumbres. 3. “Si hablo de eso con mis hijos van a querer ponerlo en práctica desde muy pequeños”. Hay padres que piensan que si les explican a sus hijos todo lo referente a la sexualidad van a despertar en ellos una curiosidad desmedida, incitándoles a la práctica. Al revés, el explicarles a los hijos les da seguridad y les quita angustias. 4. “Los niños no necesitan información sobre sexo” Es un error común pensar así. Lo cierto es que necesitarán información adecuada a cada uno y a cada situación. A unos habrá que hablarles del origen de la llegada de un hermanito, a otros por qué un hombre aparece vestido de mujer en la televisión, etc. Todos necesitan información de acuerdo a su maduración y a su grado de comprensión. 5. “No sé cómo empezar a hablar de eso” Es habitual no saber enfocar la conversación. Se generan sentimientos -de vergüenza, por ejemplo-, que pueden interferir en el diálogo; por ello es necesario trabajar con nuestros propios miedos y sentimientos. 6. “Para qué le voy a hablar, si todavía no entiende” Aparece el miedo a meterse en líos hablando de sexualidad. Siempre entienden algo de lo que se les dice, sobre todo si es desde el amor y la ternura. Un bebé responde a la calidez del abrazo de su mamá y a la voz suave y tranquila: no comprende el significado de sus palabras pero las va asociando a las actitudes. Y así va creciendo y de a poco va comprendiendo el significado de las palabras asociadas a los gestos. El lenguaje de la sexualidad es amplio: se trasmite desde lo corporal, lo gestual y lo verbal. 7. “No sé qué palabras usar ni cuánto decirle” Una dificultad que se plantea es el tipo de lenguaje: lo aconsejable sería usar los términos correctos, pero sin “asustarse” si aparecen palabras cotidianas y aun vulgares; recordemos que estas connotaciones tienen que ver fundamentalmente con la forma en que se emplean. En cuanto a la cantidad de información, es necesario escuchar bien la demanda y satisfacerla, tratando de no dejar dudas, pero sin ir mucho más allá de lo que el/la niño/a solicita.

jueves, 14 de marzo de 2013

PUNTO G MASCULINO. MITOS Y PREJUICIOS

Somos proclives y más desinhibidos a la hora de hablar de la sexualidad femenina, sus puntos de placer, los tabúes de determinado tipo de posiciones, fantasías o fetiches, que hacerlo respecto a la intimidad masculina. Como bien saben los que argumentan (los profesionales), la sexualidad es un umbral exquisito de alternativas que vive una pareja en la intimidad; y que tiene que ver profundamente con los deseos, fantasías y límites de cada persona. En la mitad de esta perspectiva, temas como el denominado “punto G masculino” generan sin lugar a dudas cierta sonrisa-tabú-socarrona respecto al tema. ¿El por qué? Porque ese punto de placer máximo en el hombre convive acodado con determinados prejuicios sobre la sexualidad, la homosexualidad, y lo que “un hombre” puede -o no- llegar a hacer entre cuatro paredes. Pero lejos de demonizar o brindarle al tema un halo informativo superficial, el doctor José Luis Rodríguez, sexólogo, especialista en disfunciones sexuales, y médico psicoterapeuta (especialista en sexología clínica) aclara dudas y combate mitos y prohibiciones. Una nota para hombres y mujeres sin prejuicios, con ganas de informarse. ¡Macho, dijo la partera! No sólo lo habrá gritado en la sala de partos la obstetra, sino que seguro que en su crecimiento, el hombre en general lleva consigo (al igual que la mujer) ese presupuesto de lo que un “macho”, y “un hombre”, supuestamente es y debe hacer. La sexualidad dispara con más saña en este sentido, ya que para ambos sexos ha determinado temas tabú, que prefieren no hablarse, o sobre los que simplemente cabe el chiste fácil, o la desinformación. En este sentido, empecemos por lo primero. ¿Qué es el punto G? Según contó Rodríguez, “si hablamos de la mujer es una zona de la vagina que describió en 1929 el ginecólogo Ernst Graffemberg ubicándola en la cara anterior de la misma, en el tercio externo; más o menos introduciendo una falange de un dedo. Se describe como una zona con una sensibilidad diferente al resto, y con posibilidades de que, siendo estimulada, despierte sensaciones placenteras que llevan al orgasmo”. - ¿Y en el caso del hombre, dónde se sitúa? - Para algunos autores, en el varón sería una zona que se encuentra en la cara posterior de la próstata. Lo que se estimularía en este caso es la cara posterior de la próstata y en especial la porción bulbar del pene. Por ser una zona interna y por analogía con la descripción de Graffemberg, se lo llama punto G masculino, pero éste autor nunca hizo referencia a él”. - ¿Cómo debe hacer la mujer para llegar a ese punto? - Necesariamente el acceso es a través del esfínter anal, introduciendo un dedo en el recto y presionando hacia la cara anterior. Siempre y cuando la pregunta se refiera a estimular al varón. Si la mujer quiere estimular su propio punto G, introduce la primera falange de su dedo en la vagina y busca en la cara anterior una zona que presenta una sensación diferente al ser tocada que el resto, y que al tacto se presenta como una pequeña protuberancia o rugosidad”. “Ahí, no” Para muchos varones la alternativa de experimentar el punto G con su pareja, les genera curiosidad; pero muchas veces desisten de la misma por vergüenza ante su pareja, ya que socialmente lo vinculan erróneamente a la homosexualidad. Rodrigo es el nombre ficticio de un joven de 33 años, bancario, que lleva con su pareja, una convivencia y sexualidad buena desde hace un año; pero que, consultado al respecto, expresó: “Con mis amigos, cuando lo hablamos, se cae en el chiste fácil, y se liga a una elección sexual diferente; cuando en realidad, si te informás, te das cuenta que no es así. Que seas gay o heterosexual no tiene nada que ver, se trata de experimentar placer. De todas maneras siempre quise probarlo, pero me da mucha vergüenza decírselo a mi novia”. En este sentido son los prejuicios los que juegan en contra de la práctica que una pareja haga, en busca del placer, y de algo diferente después de un tiempo. ¿Porqué la mayoría de los hombres heterosexuales no se permiten probar si lo desean? Según contó Rodríguez “por la asociación que se hace entre estimulación anal y orientación homosexual. Este es un concepto equivocado, el erotismo anal no es exclusivo de los varones homosexuales y ni siquiera de los varones. La región anal y perianal es una zona erógena en el ser humano, independientemente de su sexo o de su orientación sexual. Para ser claro es esperable que haya posibilidades de experimentar placer sexual con la estimulación anal tanto en varones como mujeres. Como en cualquier práctica sexual, habrá personas para las que resultará placentero, y otras para las que no. En ambos casos es válido, ya que la libertad de explorar la sexualidad es un derecho. Una vez que se llegó a ese punto ¿Qué implica para el hombre? ¿Máximo clímax? ¿Orgasmo, o mayor placer como preludio de la eyaculación? “Algunos varones refieren justamente todo eso que incrementa la sensación del orgasmo, que aumenta la excitación previa, y la percepción subjetiva de un incremento en el volumen del líquido seminal eyaculado” precisó el sexólogo. “Yo lo hice porque se dio en una relación casual, y la verdad: me gustó. Quizá porque fue un ‘touch and go’ casual con una chica sin prejuicios, que no era mi novia, y me llevó a experimentarlo, sin siquiera tenerlo como objetivo en la cabeza. El prejuicio está, pero el placer que se siente, también. Es una cuestión de información y de vivir la sexualidad sin tanto mambo”, contó Federico, de 27 años, barman de un boliche. Algunos sí, y otros no. Algunos que desearían probar, y otros que no lo ven como opción, o que quizá probaron, y no les gustó. En sexualidad cada experiencia es única y válida. “Lo que más pesan son los mitos. Por un lado los que asocian la práctica de la orientación sexual hétero, la homosexualidad. Y por otro, los que la asocian al dolor. Muchas veces, en nuestra expresión diaria, nos referimos a lo anal con el verbo ‘romper’, o ‘lastimar’, y eso implica violencia. Estos mitos y actitudes se sostienen justamente por la ignorancia, la falta de información y educación. Lo ideal es poder hablar libremente en la pareja de lo que a cada uno le gusta, o no. A veces la espera puede resultar eterna, o podemos atrevernos a dialogar con nuestro par, para vivir la sexualidad en pareja, como realmente queremos”, concluyó el sexólogo

martes, 5 de febrero de 2013

"SAN VALENTÍN" INSPIRACIÓN EROTICA

Ahora que se acerca San Valentín, me decido a compartir con vosotras una historia, por su contenido…. erótica…, como no podía ser de otro modo en este Blog. Hace casi un año, por estas fechas, con las chicas del trabajo se nos ocurrió organizar una reunión TupperSex y aprovechar para inspirarnos y comprarles algún regalito a nuestras parejas…. Todas casadas o viviendo “en pecado”, todas hablando a diario de nuestros problemas sentimentales y por qué no decirlo, sexuales, decidimos que podía ser una ocasión ideal para quedar, hacer algo juntas, reírnos un rato y encima, disparar nuestra imaginación en esas vidas que, para la mayoría de nosotras, empezaban a volverse monótonas y demasiado rutinarias…. Podéis imaginaros, la mayoría con niños, horarios imposibles, trabajos, etc., al final conseguimos quedar una tarde de viernes en mi casa para hacer la reunión, aprovechar y cenar juntas y salir luego a tomar una copita si se terciaba… Os podéis imaginar que, MimoIntimo fue la encargada de hacernos la sesión TupperSex y que por eso hoy cuento aquí mi historia, pero no es de la reunión en sí de lo que os quiero hablar, ni es en esa tarde en concreto en la que quiero centrar mi relato. De esa tarde, sólo os diré que lo pasamos genial, que la chica que vino a hacernos la reunión, no podía ser más simpática, amable, natural y hasta “paciente” con nosotras, que llevábamos un cachondeo increíble, sino que además…. nos asesoró genial y se puede decir que fue “fuente de inspiración” para la mayoría de nosotras!!! ¡Qué tarde más grande!!!, cuando me acuerdo siempre acabo sonriéndome a mi misma….. una experiencia increíble y muy recomendable. El caso es que, compramos un montón de cosas, por supuesto, ninguna de nosotras había entrado nunca antes a un sex-shop ni nada similar y descubrir tantas cosas, tantos juguetes, tanta cosmética erótica aplicable al más sencillo de los juegos en pareja…. Ufff!!!!, me excito sólo de pensar en mi “caja de los tesoros”…. A los pocos días era el día de San Valentín…. Mi marido llegaba tarde del trabajo, así que, tenía tiempo…. Por la mañana me preguntó si quería salir a cenar a algún sitio para celebrarlo, pero sin demasiadas ganas…. ¡Maldita rutina, que acaba por apoderarse de todo!!!, pero esta vez no… No soy muy dada a tener este tipo de iniciativa, pero ya os digo que además de mi “caja de los tesoros”, mi imaginación había cogido las riendas y no pensaba frenar ante nada!!.... Preparé un poco de marisco para cenar (¡es afrodisíaco!!), y una foundee de chocolate y frutas… nada más… a parte del cava casi helado, claro…. , ahora le tocaba al escenario….. Encendí incienso de feromonas por toda la casa, especialmente en la habitación, y en la mesilla de noche dejé encendida una vela que, cuando se deshace se convierte en aceite calentito de masajes, unos polvos comestibles con un plumero que sólo de imaginarme los rincones de mi cuerpo que podía acariciar, se me erizaba la piel…. lubricante, por supuesto, que no faltara y un pequeño kit de bondage, ya sabéis…. antifaces, ataduras para manos y pies…. Dejé tirados por la cama también algunos juguetes que me apetecía mucho probar con él… qué mejor manera de insinuárselo, ¿no??, un vibrador, un estimulador anal, una anilla para el pene…. Ufff… yo ya, sólo de prepararlo y comprobar que todo estuviera “cargado”…. Me estaba poniendo como una moto…. Pero eso no era todo….. dejé un camino de pétalos de rosas por toda la casa, y preparé también… en un lugar estratégico, un gel que compré, dilatador y analgésico…. Y pensaréis…. ¿para qué?.... muy sencillo…. El regalo que quería hacerle a mi marido no eran sólo esos juguetes, ni la exquisita cena, ni la noche de lujuria y sexo desenfrenado que le esperaba…. Era mucho más…. llevaba tiempo insistiendo en que le gustaría penetrarme analmente, pero para mí, las veces que lo habíamos intentado había resultado bastante doloroso, él también había intentado disfrutar de su punto G, también quería probar la penetración anal y el placer que esconde para ellos, sobre todo después de que una vez le expresara una fantasía sexual que me excitaba…. ponerme un arnés, con un vibrador y penetrarle yo a él…..así que…. esa noche, mi regalo para él, (con la esperanza de que ese gel me ayudase), era “mi virginidad anal”….. y esperaba, por supuesto, que él se animara también a regalarme lo mismo…… Lo siguiente fue preparar el baño…. Una bañera de agua bien caliente…. No os lo vais a creer (yo ni sabía que existían), pero sí…. también compré en la reunión un jabón especial para hacer espuma comestible… con sabor a frambuesa….. unos pétalos de rosa más en el agua…. Unas cuantas velitas en el baño….. y ya…. sólo faltaba yo…. ufffff!!! Me estaba excitando por momentos…. con tanto preparativo, es como cuando preparas una comida exquisita y no la puedes probar hasta el final….. por supuesto ya me había ocupado de ducharme y depilarme…. Para el pubis…. os recomiendo otra cosita que compré…. Jejejeje, unas plantillas para rasurarlo con las formas más divertidas…. Por supuesto, la ocasión requería un corazón, así que… ese era el aspecto que tenía ahora…..sólo faltaba la lencería…. Bueno…. me pirra la lencería, así que, a pesar de que había hecho varias adquisiciones en la reunión, tuve que escoger y escogí un coulotte negro con volantitos y liguero, con una práctica obertura en el pubis, que quedaba discretamente camuflada (nada hortera… odio lo hortera)…. medías de rejilla, por supuesto, y unas pezoneras de pedrería negras, preciosas…. No tengo mucho pecho, pero da igual, la verdad es que no podían quedar más sugerentes!!!. Lista!!!!..... a esperar…… Confieso que, cuando había terminado todos los preparativos, me sobraba demasiado tiempo, así que…. aprovechando mi excitación y para calmar mi curiosidad, que jamás había jugado con un vibrador, cogí el pequeñito….. un vibrador “básico”, como le había llamado la asesora en la reunión…. Supongo que lo dijo porque fue “básicamente” una pasada!!!, claro que…. repito…. jamás había jugado antes con uno…..un tacto increíble, distintas intensidades de vibración…. pequeños cambios de ritmos….. y esos deliciosos golpes de placer!!!.... madre mía, si hasta gritaba yo sola en casa….. me puse ante el espejo, porque encima la visión de ese vibrador introduciéndose una y otra vez en mi vagina…. la visión de mí misma vestida así…. uffff!!!!!.... Después del tercer orgasmo lo dejé por miedo a no tener más ganas cuando llegara mi marido…. Ya me veía a mí misma recogiéndolo todo a todo correr y reservándolo para otra ocasión… sacando del armario el perfume que había comprado días atrás como regalo de San Valentín y maldiciendo este dolor de cabeza tan terrible que tenía y que nos iba a fastidiar la noche!!!!, jejeje….. pero no…. ¡menuda sorpresa!!!….. lo único que había conseguido jugando con mi maravilloso y nuevo vibrador fue activarme aún más!!!….. era como si mi sexo hubiese cobrado vida propia, como si me avisara de que… había destapado la caja de pandora y no la iba a poder cerrar tan fácilmente… Cuando por fin llegó….. mi excitación, al ver la suya, no hizo más que crecer, estaba cómo loca por probarlo todo con él, pero no tan rápido…. no teníamos prisa….. fue una noche larga, mágica, increíble y muy, muy, muy placentera…… no sé si fue el baño caliente…. las feromonas del ambiente y del perfume que llevaba, el afrodisiaco del marisco, el cava que bebimos de “todas partes”…. el chocolate que acabamos comiendo directamente del cuerpo, la fruta que colocaba en mi clítoris delicadamente para comerla aún más suavemente… el gel analgésico y dilatador….. no sé qué fue…. ¿fue una cosa??, ¿fueron todas??…. ¿fui yo?, ¿fue él??… ¿fue la fantasía??, ¿el erotismo que impregnaba todo??…. no lo sé, ni me importa demasiado, el caso es que todo junto fue sencillamente genial… en mi vida he podido sentir tanto placer reunido en una sola noche y sobre todo…. conseguí brindarle todo mi placer anal (ni siquiera sospechaba que pudiera ser tanto), y conseguí hacerle retorcer de placer penetrándole yo a él…… Faltan pocos días para San Valentín….. yo ya estoy preparándolo todo…. ¿tu no??..... El próximo año os lo cuento si os ha gustado mi historia….

miércoles, 30 de enero de 2013

BÉSAME MUCHO

El beso. La forma más clara de expresar cariño, sentimientos, emociones y pasiones. La boca es el primer lugar donde se asienta el deseo. ¿Qué es un beso? El beso es el acto de tocar algo con los labios, generalmente a otra persona. Es una práctica habitual entre los humanos en la mayoría de las culturas, también presente en otros primates, los chimpancés, por ejemplo, practican bien el besarse. El beso puede darse de muchas formas y en muchas partes del cuerpo y no solo en los labios. Dependiendo del país y la época se realiza de diferentes maneras. La palabra proviene del latín "basium" –acción de besar- y besar del latín "basiare", tocar algunas cosas con los labios contrayéndolos y dilatándolos suavemente, para manifestar amor, amistad, o reverencia. Una idea afirma que nuestra primera experiencia de confort, seguridad y amor procede de las sensaciones de la boca asociadas con la lactancia, nuestra primera forma de conectarnos con la vida y con el mundo. Hay diferentes tipos de besos y se los clasifica de diversas maneras, hay besos como saludo, los hay afectivos o amorosos, de subordinacion y respeto como besar las manos o los pies. El beso esquimal, el mariposa, los besos simbólicos como el de blancanieves y la bella durmiente. El beso de Judas, el de muerte de la mafia y para el Kamasutra hay por lo menos 30 tipos de besos. Más allá de las diferentes maneras de besar, desde la salud, dividimos a los besos en cuatro según el lugar, la duración y el intercambio de saliva: A) Besos secos, o sociales: son los besos en la mejilla o arrojados al aire. También el mariposa o esquimal. Suelen ser breves y sin intercambio de saliva. B) Beso en la boca: es el dado en los labios pero con apenas contacto, con poco intercambio de saliva. De duración un poco más larga que el anterior. Llamado comunmente "pico" o "piquito". Muy usual en la pareja, y en ciertas familias es una muestra de afecto entre padres e hijos y entre hermanos, principalmente cuando los hijos son niños. C) Beso profundo o francés o húmedo: en la práctica se introduce la lengua en la boca de la persona a la que se está besando. Es el de mayor intensidad. Es un beso con intercambio de saliva, y de mayor duración. D) Besos corporales y/o sexuales: son besos de alto contenido erótico, que se desarrollan durante la seducción, el cortejo o la relación sexual. De amplia variedad y duración, con o sin intercambio de fluidos corporales. Beneficios de los besos para la salud: El beso no sólo es una muestra de cariño: es también un remedio natural, gratuito y al alcance de tus labios. Tras varias investigaciones se ha demostrado que los besos son terapéuticos. - Queman calorías. Un beso de tres minutos quema al menos doce calorías, siendo un complemento de las dietas. - Suben el ánimo, mejoran la autoestima. - Besarse con frecuencia, activa la circulación sanguínea y ayuda a las personas a enfermarse menos y a vivir más años. - Los besos nos dan bienestar porque nos hacen liberar oxitocina, una hormona importantísima en el enamoramiento, el orgasmo, el parto y el amamantamiento, asociada con el cariño, la ternura y el contacto físico con los demás. - Besarse estimula la liberación de endorfinas, unos opiáceos naturales del organismo que provocan una sensación placentera; actúan como antídoto para la depresión, la angustia, el desánimo, la tristeza o la aflicción. - Los besos que aportan más beneficios a la salud y contra las tristezas son aquellos cargados de excitación y emoción, pues más hormonas se liberan en la sangre y mayores son los beneficios para el organismo. - El beso estimula la secreción de distintas hormonas que funcionan como analgésicos y que fortalecen nuestras defensas inmunológicas. -Las parejas felices se besan más que las infelices. Se besan en todas las situaciones, el beso por la mañana, al despedirse, al saludarse. -Un beso es la mejor terapia, principalmente para superar las depresiones -Los beneficios para la salud provocados por un beso apasionado se explican porque una fuerte liberación de adrenalina provoca un aumento de la tensión arterial y del ritmo cardíaco. -El beso lo podemos disfrutar en la intimidad y en público. -En la relación de pareja son muy valiosos, es un pilar de la relación sexual, de la complicidad, aumentan el vínculo y la confianza y seguridad en la pareja. - Cuando nos besamos utilizamos cerca de 30 músculos lo que disminuye la formación de arrugas en la piel, mejora sensiblemente y estimula su regeneración. - Está demostrado que las personas que reciben y dan a menudo besos apasionados tienen menor probabilidad de sufrir alexitimia, que es el desorden neurológico que consiste en la incapacidad del sujeto para identificar las emociones propias y, consecuentemente, la imposibilidad para darles expresión verbal. - En enfermos es recomendable porque ayudar a su pronta recuperación y fortalece las defensas inmunológicas y en sanos porque mejorara su calidad de vida. - Pero, ¿cómo saber si estoy besando al príncipe azul o si me encuentro ante una 'rana'? Hay estudios científicos que apuntan a algo más que la intuición para saber si tenemos ante nuestros labios la boca correcta. La "química", pues, existe: la neurocientífica Wendy Hill, investigadora del Lafayette College de Pensilvania, asegura que en la saliva de ese momento podemos encontrar sustancias que serán de gran ayuda para evaluar si la pareja que estamos besando es la idónea. Según Hill, si nos encontramos ante nuestro 'príncipe de cuento', se reducen los niveles de cortisol y la hormona del estrés. - Previene la caries igual que la pasta dental. - Ayuda a combatir el dolor, pues mientras más apasionado es, más endorfinas se segregan y esa actividad hormonal tiene un efecto superior a una pequeña dosis de morfina. Fundamentos del beneficios de los besos En el acto del beso intervienen la mezcla de tres a cuatro sentidos; el gusto, el olfato, el tacto y en ocasiones la vista. Es una actividad compleja en relación a la participación de elementos anatómicos y de respuestas fisiológicas. La boca es la parte más móvil del cuerpo y un beso apasionado activa nada menos que 34 músculos mientras que un beso en la mejilla sólo activa doce músculos faciales. Participan 5 pares craneales, el nervio facial, el hipogloso, glosofaríngeo, el olfatorio y el nervio trigémino, de los doce que tenemos. Según estudios, los hombres que besan a sus esposas por la mañana pierden menos días de trabajo por enfermedad, tienen menos accidentes de tráfico, ganan de un 20% a un 30% más y viven unos ¡cinco años más! Un simple beso puede ser un método efectivo para analizar los centros de placer cerebrales. La boca es el camino a la respuesta sexual humana. Filemamanía, es el nombre científico que recibe el deseo de besar. Según los expertos, si hay comunión mental y la suficiente atracción física en el beso, el alud de procesos químicos que se suceden provoca una auténtica conmoción en el organismo. El efecto es tan abrumador que, según algunos biólogos, podría compararse a una sobredosis de anfetaminas. La hormona gonadotropina se libera en ambos miembros de la pareja y, a su vez, lleva a la liberación de estrógenos y testosterona. La sangre llegará a partes sensibles de la anatomía. En el hombre, se produce la liberación de óxido nitroso, químico que relaja los vasos sanguíneos y seguidamente se producirá la erección (el ahora famoso medicamento Viagra, trabaja aumentando el efecto del óxido nitroso a nivel de los cuerpos cavernosos del pene y ayuda a mantener la erección por más tiempo). El beso En algunas comunidades era considerado impropio que un hombre besara a una mujer antes de haberle propuesto matrimonio y esta hubiera aceptado. El beso nupcial entre el novio y la novia es un aspecto importantísimo de la ceremonia matrimonial. Por el contrario, en la Italia se tomaba tan en serio que si una doncella era besada por un joven en público, se hacía obligatorio el matrimonio entre ambos. Y a principios del siglo XI Pietro Landó, duque de Venecia, mandó decapitar a su propio hijo acusado del delito de haber besado en público a una joven de la que estaba enamorado. Algunas precauciones En un beso entre dos personas además de cambiar sentimientos y placer, en el preciso instante que deslizamos nuestros labios también estamos intercambiando nuestra salud oral con la pareja y viceversa. Se sabe que alrededor de 40 mil microorganismos cambian de dueño cuando damos un beso y también intercambiamos la saliva con su correspondiente pH. Sin embargo, al besar, el cuerpo produce todo tipo de neuropéptidos, unas sustancias químicas que evitan las infecciones. Besar estimula la saliva, que elimina partículas de comida de los dientes. También hace disminuir el nivel ácido que causa las caries y la placa dental. Unos dicen que son muchos los beneficios que aporta un beso de amor; otros opinan que acarrea contagios y enfermedades entre personas sanas y enfermas. Sin embargo, el beso puede también ser mortífero, como comprobó una chica canadiense, Christina Desforges, quien murió tras darle un beso a su novio que acababa de comer un sandwich de mantequilla de cacahuete, a lo que ella era alérgica. Aun cuando este acto es beneficioso para la salud, debe omitirse en casos de enfermedades altamente contagiosas, como la mononucleosis (llamada popularmente enfermedad del beso), la gripe A (H1N1) o la hepatitis A, entre otras. El virus del SIDA no se propaga con un beso, a no ser que fluyan sangre o fluidos corporales. Queda una recomendación: ¡HAY QUE BESARSE MÁS!