jueves, 20 de septiembre de 2012

LESBIANAS: SALIR DEL ARMARIO, el miedo, exclusión social

Nos hacemos eco de un artículo publicado en la web DIARIO FEMENINO, porque nos ha parecido muy interesante dirigirnos también a vosotras y animaros a vivir libremente vuestra sexualidad, así como, de "normalizar" la imagen que, todavía, (aunque por suerte, cada vez menos), un sector de la sociedad continúa teniendo sobre gays y lesbianas. "Aunque nos parezca increíble y pensemos que hoy en día tenemos garantizadas nuestras libertades individuales, lo cierto es que a la sociedad aún le queda mucho camino que recorrer para aceptar a quien no sigue la tendencia dominante. Ocurre, entre otras muchas cosas, con la sexualidad. Ser homosexual o lesbiana puede provocar el rechazo de las personas que te rodean, por eso a veces no es fácil salir del armario y declarar abiertamente tu orientación sexual puede suponer un problema. La adolescencia para salir del armario Según un estudio realizado por la web de contactos para lesbianas LesbianHeart.com la mayoría de las mujeres que dan a conocer a los demás su condición sexual como lesbianas lo hace en la adolescencia. El 45% de las encuestadas afirmó haber comunicado durante su adolescencia a sus allegados que sus preferencias sexuales no eran las de la mayoría. Entre los 15 y los 18 años fue cuando reconocieron su homosexualidad a los demás, época que coincide generalmente con el descubrimiento de su propia sexualidad. El 35% de las encuestadas esperó un poco antes de hacer público su lesbianismo, entre los 20 y los 40 años, considerando que necesitaron un tiempo antes de asumir su propia condición sexual y fue cuando ya estaban seguras de ella que se lo comunicaron a sus familiares y amigos. Queda el 20% restante que retrasó todo lo posible su salida del armario, después de los 45 por el miedo a la reacción de sus allegados. El mejor momento para salir del armario No hay reglas para determinar cuándo es el mejor momento para salir del armario. Gays y lesbianas saben mejor que nadie que aún existen reparos y barreras sociales como para declarar abiertamente su homosexualidad y no sufrir ningún tipo de rechazo. Por lo tanto, el mejor momento para salir del armario sólo lo puedes decidir tú misma. Obviamente, la decisión depende de tu entorno familiar. Tu círculo de amistades suele ser más comprensivo, aunque pueden surgir algunas dudas por parte de tus amistades heterosexuales acerca de la verdadera relación que tenéis. Sin embargo, son reparos que desaparecen a la primera explicación. Más complicado es decírselo a la familia. La incomprensión entre generaciones es un hecho en casi todos los hogares, y en cuestiones de sexualidad se suele abrir una brecha insalvable. Pero que no te detenga la posible incomprensión de algunos miembros de tu familia, porque cuanto antes asuman ellos tu condición sexual, antes conseguirás quitarte esa sensación de estar mintiendo al mundo. Salir del armario se hace necesario para poder llevar una vida plena, así que no esperes demasiado para tomar la decisión. Puedes probar primero a confiarte a una o dos personas de las más cercanas, y ver cómo reaccionan. Ellas también te pueden ayudar a conseguir exponer el tema con delicadeza y a resolver las dudas que las personas heterosexuales puedan tener. Ten en cuenta que parte del rechazo viene de la incomprensión. Tratándose de tus seres queridos, sí debes esforzarte para que entiendan y asimilen la situación. Laura Sánchez"